Perlunes por Pola de Somiedo

Subida durísima como podremos ver nada más comenzar cuando tengamos que superar una primera rampa de hormigón. La subida continúa alternando asfalto y hormigón (en los tramos más duros) hasta llegar a un primer collado, desde el que las vistas hacia el Valle de Somiedo y la zona de Valle de Lago, merecen la pena. Tras un descenso vertiginoso -que a la vuelta puede hacer mucho daño- llegaremos a Aguino, donde podremos descansar un poco porque el kilómetro siguiente es criminal: alternando otra vez asfalto y hormigón, tendremos que superar pendientes por encima del 20% hasta llegar a un túnel donde la pendiente nos da un respiro. La carretera es tan estrecha que apenas podremos abrirnos en las herraduras para "fabricarnos" un descansillo. Una vez llegados al túnel, habremos pasado lo peor y tendremos el pueblo a la vista.